Ella se yacía en su lecho de palo de rosa,
Alrededor pasaban infinitos anocheceres
Con los más oscurecidos colores,
Trenzando mediante cada rayo de luz de luna
Una emoción diferente que desfloraba su alma..
Solo cerraba sus ojos
Y pensaba en romper aquella nebulosidad
Con tan solo tocar los labios de aquel ser
Que es el único capaz de dejar su cuerpo ímpetu
Ante la efusión de ver su intensa mirada
Concentrada en su silueta vista entre las sombras.....
Texto agregado el 13-04-2012, y leído por 68
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