Soy mujer,
con el
alma dolorida
con distancias insalvables
enredada entre mis
dedos como hiedra a
mi destino aun no vivido.
En la penumbra te espían
mis ojos de mujer,
eres
tan etéreo como el aire,
cristalino como el agua
tan hermoso como nadie
tan intenso como los rayos del sol.
Gélido manantial
donde quiero beber
el elixir de la vida
de esa vida que
no florece
que no es cálido para mí.
Invento un lugar nuevo donde quedarme
sin dejar que se me escape la libertad,
como las lágrimas
de mí alma,
al ver llegar ni destino aun no vivido
lleno de amor hacia ti
por ser simplemente mujer.
.*N.N*.
. .
Texto agregado el 12-03-2012, y leído por 103
visitantes. (1 voto)
Lectores Opinan
12-03-2012
Poema muy sentido, profundo y bien logrado. Felcitaciones*****. alfildama
12-03-2012
Mucha sensibilidad muestran tus palabras. dark_suns
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