Yo no vine ebrio a esperar Que cayeras de una valla publicitaria Entre grandes edificios Como una giganta Bésame con un 1789 francés, Y que dios decida que arte Ponerle al tatuaje que lleva La blanda piel de la razón Un piano suena con cierta demencia entre las uñas Bésame con un 1789 francés Que la idealidad va prisa Con sus zapatos rotos efímeros, Olvidemos un poco la respiración Tratemos de pensar en otro lenguaje No tan distinto al de los pescadores En la captura de sus monstruos Pero si de actitud liviana como la carroña de un tango Pisoteada por sus danzantes Bésame con un 1789 francés Y que se asome a la ventana un desfile militar Con una dermis mayor sobre sus cascos, Con cierta tragedia comienza cesar de llover Quedan expuestas las calles a la noche El pavimento a la humedad y los pasos, Nada de especial hay en que huelas mi temor Porque los maniquís detrás de las vidrieras y neones Lo delatan Y vuelve hacerlo nuevamente Bésame hasta que el castellano Se vaya de mis labios con los vapores del licor, Hay un malecón largo Esperando el temblor de tus mareas entre sus piernas Con tu regreso.
Texto agregado el 11-03-2012, y leído por 159 visitantes. (4 votos)