- Increíble, Sarita, te cuento que hoy me encontré con mi compañero de la primaria, después de treinta años. Cuando lo vi, no pude reconocerlo. Lucía muy bien, a diferencia de cuando era niño. Ni te imaginas, Sarita, este chico tenia una piel quemada por la brisa del Puerto del Callao.. El pobrecito, se dedicaba a vender pescado en el mercado. !Era feo, pero siempre fuimos amigos!.
- Qué buen encuentro. ¿Porque no salen a compartir algo y asi hablan de sus travesuras de colegio?
- Por supuesto, Sarita. Vamos a renunirnos en La Blanquirroja para tomar un piscosour heladito, con unos piqueítos. La idea de salir juntos, me hace feliz.
Ese primer encuentro fué agradable. Ambos reímos a carcajada limpia al recordar el día del simulacro del temblor, cuando lo encontraron metido en un bote de basura. Fué gracioso cuando salió de su escondite con una carita medio sucia y asustada.
- !Eras tan ocurrente, Carmelo. Siempre hacías cosas impredecibles, como colgarte de la campana del colegio. A todos nos hacias salir de prisa creyendo que era el recreo. Nadie podia con tu genio, hermano.
Al poco tiempo, nos volvimos a encontar de casualidad cuando él estaba por tomar un taxi. Al verlo, me quedé boquiabierto. Era increible que su varonil apariencia y su impecable vestimenta habían desaparecido en el lapso de solo unas semanas. Me preocupé de su alicaído aspecto. En medio de la trajinada avenida Tacna, le toqué la vocina y le grité !Hey, Carmenlo, sube, amigo!.
No tenía tiempo para estar con rodeos. Le hice una pregunta que, seguramente, se la clavé en toda la herida, pero fué necesario hacerla.
-Qué sucede Carmelo?. Te veo desmejorado. En qué puedo ayudarte?. Recuerda que soy tu amigo, pero, también soy abogado. Siempre hay una salida para cada problema.
-Me parece haber envejecido en estos dias. Despues que nos vimos, mi estimado Hilario, mi suerte cambio y el destino me jugo una mala pasada.
-Es tan grave lo sucedido?. Has asesinado a alquien?.
-No, hombre. Te dire. Yo trabajaba en la conocida fabrica de cerveza Pilsen. Me encargaba de distribuir las cajas de cerveza a los clientes de mi sector. Iba a cada tienda y dejaba la mercaderia que ellos habian pedido. Les daba un plazo tolerante, a veces una semana o tres como maximo, para que cumplieran con pagar la deuda. Se trata de un negocio que lo conozco al dedillo.
-Y, eso que tiene que ver con tu aspecto?
- Justo, por esos dias, recibi la noticia que mi hija Tatiana requeria con urgencia un analisis para saber el origen de unas curiosas manchas marrones que estaban cubriendo su rostro. No tenia como afrontar el elevado gasto de tan extrana enfermedad, en una nina de apenas tres anos de edad.
- Sigue, Carmelo.
- Por eso, se me ocurrio proponer a mis clientes una ingeniosa forma de hacer sus pagos.
- No me diras que les exigiste por adelantado el pago de la mercaderia y nunca mas te apareciste por la fabrica de cerveza!.
- No te adelantes a pensar lo que no es. !No soy un ratero, ni un asesino, ni un impostor!.
-Entonces, Cual es el problema?.
- El problema es que estoy requerido por las autoridades. Tengo miedo salir a la calle. Mira esta esquela de la Policia. Algunos diarios vienen publicando mi foto como si yo fuera un gran impostor de la Pilsen.
Mientras me contaba su relato, estrujaba torpemente el bandito papel como si fuese un trapo de cocina. Si seguia asi,terminaria por romperlo. Por eso decidi quitarselo de una vez para ver la trascendencia de su contenido.
- Tengo que presentarme a la Policia pasado manana porque me acusan de Estafador, por esta cantidad enorme de dinero. Encima, me despiden y me dicen que no tengo derecho a ningun beneficio por que me consideran un “empleado que ha perjudicado los intereses de la empresa”. !Se olvidan que yo entregue veinte anos de mi vida, sin exigir vacaciones. Si no me presento me enviaran a la carcel. Todo lo aguanto, pero... !A la carcel no, por favor!
- Cual es esa propuesta “original” que hiciste a tus clientes?.
-Les dije que, del total de la compra, me regalaran dos cajas, a cambio de darles mas dias de plazo para que las pagaran. Todos aceptaron el trato, con el mayor gusto. El problema surgio cuando uno de mis clientes, el Chino Hui, se nego a pagarme la mercaderia.
-Chino, pagame ya. Esta es la cuarta vez que vengo y tu siempre escapas por la puerta trasera.
- Chino, no tenel plata. Vente otro mes. No molestal. Chino acusar a jefe tuyo que Hilario se lleva cajas a su casa. Que las vende y gana mucha plata. No meterse con Chino Hui.
Ese Chino malvado cumplio su promesa y me denuncio ante mi jefe. Ese mismo dia me votaron, como a perro callejero.
-Debo reconocer que no es etico el trato de llevarte mercaderia a tu casa, como parte del acuerdo. Pero, pese a eso, se trata de un trato hecho entre tu y los clientes. Nunca perjudicaste los intereses de la empresa. No has cometido ningun delito, amigo. Nunca te agarraste un solo centavo. Ya veo que algunos clientes se provecharon de la circunstancia para demorarse en pagar sus deudas, hasta el dia de hoy. Eso ya no es culpa tuya.
El dia de la citacion, acompane a mi amigo a la Policia. Me presente como su abogado. Exigi que la diligencia empezara con la presencia del fiscal.
-No se amargue, abogado. El fiscal nunca suele venir a estas diligencias. Mas bien, aqui le presento al gerente de la Pilsen.
Al verlo, me impresiono la imponente talla del empresario. Me sorprendio la confianza que tenia con los oficiales de policia. Se conducia con una seguridad incredible, !como si estuviera en su casa!.
El ambiente se puso muy tenso cuando el jefe policial, sin ninguna razon, ordeno el inmediato arresto de mi amigo. No podia tolerar semejante insolencia. Despotrique contra todos los policias sumisos que obedecian a “ese jefe abusivo”, sin que les importara en absoluto el atropello de esa detencion.
-Se les borrara la mueca burlona de sus rostros cuando esten en presencia del Fiscal. Lo traere a como de lugar. Ustedes no tienen una orden escrita de un Juez para detener a mi cliente. Si no lo ponen en libertad, en menos de lo que canta un gallo, entraran como sardianas apretadas, en estos mismos calabozos.
Estaba dispuesto a todo. Mi cerebro hervia como las aguas de un fogoso manantial.
Ya sosegado, en horas de la tarde, fui a al oficina del Fiscal. Este, con una sonrisa burlona, me dio una palmadita en el hombro, dando a entender que comprendia mi situacion.
-Tome asiento y preparese para lo que le voy a decir.
-El senor Minelli, ha sido un reconocido oficial de policial. Ahora esta retirado. Durante anos, el fue jefe de esa Comisaria. Estos policias fueron sus anteriores subordinados. Desde entonces fue nombrado Gerente de la Pilsen. Cada vez que pisa esa Dependencia, le rinden pleitesia, y el, en retribucion, se encaraga de regarles muchas cajas de cerveza a cada policia. Ese “acuerdo” es el que ha perdurado por anos.
- Ah…recien comprendo el circulo cerrado de esos policias con el Gerente, que resulto ser un descarado. !Exige moral cuando es un inmoral que se sirve de todos los policias!.
Ese mismo dia, Carmelo salio en libertad
Al siguiente mes, la Pilsen fue obligada a pagarle a mi amigo, todos sus beneficios, incluyendo sus vacaciones.
Ese mismo anio, Carmelo abrio su negocio de Cerveceria, al costado de la Comisaria.
Y, en este preciso instante, ambos estamos celebrando con un par de cervezas heladitas Pilsen, por el pasado, el presente y el futuro de nuestra gran Amistad. !Salud!