CARRETERO 239 palabras

Llévame escondido en tu carreta-
Haré que tu camino sea breve.
Deja que empuje tu carruaje,
Ayúdame y te asisto allá en la cuesta.

El ruido de tus ruedas, carretero,
Me llenan en alegre compañía.
No digas que no puedes llevarme,
Ella espera. Llevo su alegría.

Ella, vive aún porque la amo.
Tengo que llevarle su contento,
Mira carretero, aquí en mi pecho,
Surge muy inmensa, una agonía.

¿No querrás que ella muera por tu culpa?
¡Por no llevarle su amor, su lenitivo!
¿No querrás carretero, que yo sufra,
Y que muera, al morir mi hermoso lirio?

Llévame contigo hasta la cumbre;
Luego en el regazo del camino,
Borraré la huella ya grabada,
Quitándole al viento tierno silbo.

Gracias carretero por tu oferta.
Entonaré un cantar, a ver si corren.
A ver si vuelan tus ruedas por la cuesta.
Fustiga tus corceles, que al garete,
Las riendas se agitan en la cima.

Mira carretero, allá, el palacio.
Ahí, donde mi amada, ha que espera.
Déjame en el camino, junto al río,
Hay un cielo circundado por estrellas.

Bañado por la luz de un sol quemante;
Regado por el agua cristalina.
Ahí está carretero, está mi amada;
Espera mi llegada, soy su luna.

¿Comprendes por qué estoy que muero?
¿Ya sabes el dolor y mi sufrir?
Es que ella, es la única en la tierra,
Que envidiaron las rosas y el jazmín.

Reinaldo Barrientos G.

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