LAGRIMAS DE FELICIDAD


Estoy observando como mis lágrimas,
caen lentamente sobre mi rostro.
Mis ojos tienen un brillo especial.
Mis manos se apoyan
a ambos lados de mi cara,
y me siento tranquila.

Mi corazón late más rápido,
expresando lo que siento en este instante.
Mi mente recorre rápidamente
todas las vivencias experimentadas.

Todo mi ser participa de este momento,
que con seguridad nunca olvidaré.
Me he levantado de mi cama
después de vivir esa experiencia de vida.

Estoy sentada frente al espejo de mi pieza,
y me miro sorprendida reflejada en él ,
aún sin creer el increíble milagro de
traer a una criaturita a este mundo.

Mis lágrimas son de felicidad,
pues contra todos los pronósticos,
todo el proceso maternal
se desarrolló sin problemas.

Por eso, al contemplarme en el espejo,
me siento dichosa de ser mujer y madre,
totalmente realizada y muy agradecida
de la vida y de Dios que me ha premiado.

Guillermo Gaete C. – Alfildama ©
22.02.2012