MI MENTE


Esta oscura, temblorosa
Tratando de apoyarse
En una vereda pálida que quizás conduce al clímax
La felicidad
Tal vez llega a dar con el lago
El agua es azul, se confunde con el cielo
Celeste
Y entre ambos, donde se realiza la ilusión
Donde nada es definitivo ni preciso
Esta ella.

Allí se aloja cargada de motivos
Que han descargado su odio
Su rechazo
Su suciedad acumulada en el reguero
Que formó el duro tesón
De recorrer lo interminable
De aquella senda

La oscuridad se desvanece
Para dar paso a un enorme amanecer
El alba hace un gran ruido
Despierta mi mente dormida
Miro al lago, al cielo, al lago
Los días las horas los años
Todas las armas que salen de mi sentir confuso
Se introducen rápidamente
En lo más profundo de ese agua
La del lago.

Con la gran luz comienzo a buscar mi mente
He perdido el significado de las palabras
Vida, ser, persona, aire.

Una gran burbuja iluminada
Se impone sobre todo. En un instante.
Pero no deslumbra
No la puedo ver, solo la siento
Me invade y me transporta mas cerca del lago

Siento que me aproximo
Al equilibrio. Oigo
Sonidos acordes, tal vez una melodía que se confunde
Con los colores
Del lago
De la burbuja.
Se pierde, pero no se va
La oigo, se aproxima
Se aleja, vuelve


Me invade, me esparce confundiéndome con
El inmaculado estado, el estado de desolación
Maravillosa
Es causa del encuentro entre mi mente y mi persona
Perdida

Suena la palabra
Bien
Nadie se interpone, solamente yo que sin quererlo
Irrumpo sobre la burbuja, rompiendo el equilibrio

Y la ansiedad
De volver me hace presa de sí
Me hace presa
Doy vuelta
Regreso y abandono el estado turbio
Y mi mente.

Pero retrocedo por la misma senda...
Y veo.



Un día de marzo de 1980
Santo Domingo, D.N.
República Dominicana

“es difícil aceptar que se está siendo manejado
por un conjunto de conceptos que se alojan en la mente.
Si supiera qué es la mente, yo mismo alojaría los conceptos”

José María de Benito