Estoy recordando acostada en mi cama, cuando estabas a mi lado y me abrazabas.
Las lagrimas caen, calientes y traicioneras.
Pues había prometido nunca mas llorar por ti.
Pero había algo diferente, un sabor amargo en ella seguido por el asombro del por que se derramaban por mis mejillas...
Mi hombre, mi amor, tú mi fiel amante, el que había ocupado mi corazón.
Tú la razón por todos mi desvelos nocturos...tú no eras la razon de mi llanto.
Al darme cuenta de esto lloré con aún más rabia que antes.
¡Es que no estaba llorando por extrañarle, ni necesitarle, menos aún por que le amaba!...
Estaba llorando por que mi corazón estaba vacio, sin amor por aquel joven, y extrañaba a aquella niña una vez enamorada que dentro de mi ser , se volvió una mujer y ya no le importaba ni siquiera un poco del amor que tubo...
Lloraba , lloraba por mi , lloraba y estaba de luto por el amor que murió...
Por que aunque debía ser feliz, por ya no tenerlo en mi carne, estaba a la vez abarrotada por arrancar de mi una página de mi vida sin ni siquiera rastro de dolor.
Estaba de luto...y no era por no poseerle en mi vida, si no por lo contrario, no tener ganas, de sentir su tacto. |