Me enseñaste amar pero no a olvidar
Como dejar pasar, por el pensamiento
Cosas que en el corazón no ciento,
Eres mucho más de lo que puedo alcanzar
Y menos de lo que merezco.

Si tuviera el valor
De pedirte perdón.
Reconocería
Que soy un ladrón
Por robarme tus besos
Y también tu corazón.

Si pudiera pedir un deseo
Desearía ser un pajarito,
Para llegar al cielo
Y gritar desde arriba
Cuanto te quiero.

Podría pasar
Años sin mirarte
Pero ni un segundo
Sin pensarte.

Si medieras otra
Oportunidad
Convertiría tus lágrimas
En un mar de felicidad.

Me quedaría de rodillas
Pagando una condena.
Donde solo tus besos, me dejarían
Tan libre como el viento
Tan fuerte como un león.

Al llegar la noche
Encendería una vela.
Para pedirle a Dios
Que se acaben esta codena
Esta Condena de amor.

Autor: Cesar Castro Perea
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