Hoy esperé tu voz Que me acariciara casi de inmediato Deseaba tus colores en mi imaginación Y esperaba, como un niño, el susurrar de tu latido. Miraba imaginando tus formas: Finas, fuertes, bellas y ausentes; Para regalarles mi cariño quiltro Del mas bueno y el mas fuerte. Esperé con tantas ansias Que el amargo de mi boca cayó, Mis ojos tocaron el suelo Y mi voz se hizo nada En la espera...mi bendita espera.
Texto agregado el 04-02-2012, y leído por 143 visitantes. (2 votos)