Los nubarrones negros en el cielo jugaban a taparle la carita nueva a la luna.
Abajo dos sombras sentadas se miraban una a la otra.
- ¿Que paso vos?
- Aquí asustado vos.
- ¿Y porque vos?
- Por primera vez soñé vos.
- No jodas vos, eso no puede ser.
- Lo se, pero paso. Y los sueños se convierten en realidad.
- ¿Qué fue lo que soñaste vos?
- Que me volvía de carne y hueso.
- ¿Ser humano?... es la pura desgracia y maldición que le puede caer a un espíritu.
El silencio nocturnal invadió el ambiente.
Texto agregado el 04-02-2012, y leído por 434
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