Alguien prostituyó a la inteligencia, no sé si fueron las profecías mayas o Nostradamus y sus escritos o si fueron de plano las comunicaciones con la internet de la mano, solo se que ahora ella se vende por poco y se convirtió en una puta barata que con facilidad intimida a todos aquellos que no requieren de ella, que contrata matones y que por poco parece la proxeneta de las profecías de todos los videntes del mundo. Amedrentando a la gente cada cientos años, reclutando idiotas que anuncian de profecías que después de cuarenta intentos resultan cumplidas. Alguien prostituye a la inteligencia y la razón observa de lejos mientras enciende su habano cubano y saborea su humo a la vez que sonríe.
Alguien, no se quien, se llena los bolsillos con los temores de otros, ayudado por algunos que se dicen expertos y que atemorizan a todos esos que miran desde sus jaulas construidas con barrotes de pánico y angustia. Mientras la ignorancia se frota las manos como si lo supiera todo, pero como siempre no sabe nada, quiere parecer intelectual. Sin duda la han prostituido y hoy cualquiera esta capacitado para hablar de esto o de aquello. Porque a corto plazo la inteligencia cobra poco, pero vende mucho.
Hay que hacer algo para ayudarla, para que se le quite lo altanera y vuelva a ser humilde, para que no le crea a cualquiera y se quede con el que le dará mejor vida, para que recupere su valor en el mercado y para que todos le creamos de nuevo y sin miedos. Hay que ayudarla, darle un trabajo digno, meterla a alcohólicos anónimos y guiarla para que no se sienta sola.
Probablemente fue la ignorancia la responsable, quizá ella fue la que lo hiso y no se a dado cuenta del error que cometió y aquellos que cuentan piedras en sus jaulas de pánico y angustia, hacen lo que les pide la prostituta esa que se hace llamar inteligencia, no la escuchen y tengan cuidado, la inteligencia está en venta y aún no es de fiar.