Villano:

Mi carta debería tener una finalidad diferente, un matiz romántico y enigmático, pero en esta ocasión escribo a quien se oculta entre las sombras de una realidad falsa, a quién me toma de la mano con urgencia en un vago intento por ahuyentar el frío de la soledad. Obtener un nuevo juguete que lucir o utilizar, me duele esperar la llamada que no llega, marcar el número en el que jamás contestaran, escribir un nombre solitario en la luna mientras borras el mío y escribes el de alguien más.

Eras importante para mí, llegar cada noche o durante el transcurso del día a verte, hablarte, poder escuchar tu voz al darme las buenas noches y con ellas un beso cálido que esperaba con ansiedad. Que tonta fui al decir esa noche ¡qué contigo también aplicaba lo del hombre del momento! Sabiendo que la realidad era otra. Decidiste jugar, cuando yo me tomaba las cosas en serio, para mí fue una noche especial en la que no esperaba terminar en tus brazos, pero así fueron las cosas y eso nada ni nadie lo podrá cambiar, aseguraste buscar algo más allá de lo casual. ¡Aseguré sería solamente cuestión de piel! Demostraste después de ese día el poco valor que las palabras tienen para ti.

Duele mucho, por eso te escribo esta carta esperando saber que sucedió... Si lo tomaste como una noche de copas un juego lo hubieras aclarado desde un principio. No diré que estoy tocando fondo porque no es así, solo es la desilusión de haber conocido una persona a quien tuve en la cima y en estos momentos se me fue a los pies.

Que ilusa de mi parte creer que después de una noche, te iba a interesar volver a contactar, más aún pensar que me podías tomar en serio. No voy a esperar respuestas que tal vez no lleguen... Te crees caballero cosa que dudo mucho, sí realmente sólo te interesaba el sexo no te hubieras desgastado tanto ¡pero claro decirlo de frente era perder la presa! Si hubiera seguido mi instinto desde que te conocí y no mi corazón esto no estaría sucediendo, son cosas que pasan en la vida, lecciones que debemos aprender.

Me imagino que lo primero que hiciste fue cambiar de SIM CARD, correo electrónico así que si este mensaje llega o no a su destino nunca lo sabré, sólo sé que caí en un juego que duele y lastima demasiado, perdiendo mi valor, mis ilusiones con alguien que tal vez no valga la pena. Me estoy dando cuenta que para ser comunicadora me falta mucho para aprender a leer entre líneas. En el momento en que me regresaste la llamada el sábado con la típica frase “yo te estoy llamando”, tuve muchas dudas de si volvería a saber de ti.

Espero sigas encontrando tus juguetes en internet conmigo conseguiste lo que buscabas, entonces es lógico que no tienes nada más que hacer y yo nada más para ofrecer.

Posdata:

En ocasiones se muere una sola rosa del jardín y las demás son enterradas. ¿Me puedes decir cómo hacer para enterrar un jardín completo y sembrar rosas en el mar? Si llegas a conocer la respuesta espero me la des.

El jardín que muere es uno a corazón, el mar la fría y poco benevolente realidad. No quiero pensar lo que estaría sufriendo si me hubiera enamorado de ti, esto no impide que sigas siendo muy en el fondo la persona especial que conocí y tanto aprecio.

¡Con un te quiero que arrastra el tiempo, Marat!


© Master Marat