''Valores''.
El murmullo de los estudiantes no permite que disfrute tus recuerdos. Los que no se te salen de la cabeza. Los tienes clavado en el cerebro.
Las imagenes fotográficas son estupendas en esa página de internet que viste anoche. Las difrutaste al máximo.
Aún estás excitado. Quieres terminar la clase para irte a verla de nuevo.
Así que mandas a callar los estudiantes y te paras del escritorio. Con las manos puestas en el mismo le dices a los estudiantes que la clase por hoy terminó. Y que práctiquen los ejercicios de la página 45 del libro de matemática 1.
Los estudiantes se alegran con esta noticia. Lo que no le ha gustado es que tienen que estudiar los ejercicios de la página que le dijiste, ya que hoy, los ibas explicar.
José, uno de los estudiantes más aplicado, te hace la observación. No es un reclamo, no. Eres un profesor muy respetado. Pero sí una observación.
Les pides disculpas y al mismo tiempo les pides que traten de hacer los ejercicios que puedan y, que en la próxima clase, les aclarará cualquier duda.
Los buenos estudiantes te entienden, los malos, se alegran. Una hora para pasillar en la universidad.
Abandonas el aula y te dirige al parqueo de motores. La pasola que utilizas para transportarte, se encuentra aquí.
Mientras le quitas el candado de seguridad, el recuerdo de las imagines que viste anoche, te excitan otra vez.
Cómo no disfrutar ver esos botones de rosas!
Fue por coincidencias que te topaste con esa página. Aunque eso va en contra de los valores que profesas, es lo que más feliz te hace. Haz hecho tuyas la palabras de Jesús -dejas que los niños vengan a mi-. Sí, las hecho tuyas.
Disfrutas ver las niñas, jugar con las niñas, tocar las niñas. Hacerlas felices. Si tus estudiantes supieran como disfrutas a las niñas! Pero nunca se enteraran. Ha aprendido a ocultar éste deseo. A disimular esta preferencia. Te ha vuelto un maestro en el arte de la simulación. Y eso te da seguridad. Además, a quién se le ocurriría cuestionar a un profesor ejemplar ante la sociedad. A quién!
No te detienes en tu hogar por la prisa que llevas. Va directamente a la papelería que posees. Tu complemento económico. Ya que el sueldo de la universidad no te alcanza. Entras pero no la abre. Quieres disfrutar por un rato la nueva página que ha conocido. Enciendes el computador. Digita la clave, y listo. Va directamente a la pagína que te hizo despachar los alumnos ante de tiempo. -www.niñaslinda. com-. Al abrirse ésta, la lujuria se manifiesta con todo su esplendor. El aura satánica es abrumadora. El dominio de la carne sobre el alma es absoluto. Las fotos de las niñas desnudas te satisfacen y te excitan a plenitud.
La sangre fluye por todo tu cuerpo a una temperatura muy elevada. No aguantas más. Levantas el teléfono para llamar a tu esposa. Después de sonar varias veces ella lo contesta. Le dices que venga a abrir la papelería que necesitas hacer unos ejercicios para la clase de mañana, pero que dejes a Bombosito -la hija de ambos- para no estar solo en la casa.
Sandy Valerio. |