CÍTARA

Como aroma sin perfume
esguince sin herida,
te extraño me hecho de menos
mi cítara canta una canción reprimida.

Extraña calma,de ella se adueña
sobriedad a medias,observante se empeña,
sus cuerdas protegidas por un manto
aún gritan,dime tú cuanto...

Olvidé dormir,hoy no quiero ser santo
quien rinde en ella el llanto?
olvidé mentir,hoy no quiero ser santo
a quién culpo de mi propio canto?

Quién me mira a través del espejo?
simplemente un rostro cual no recuerdo,
hoy no consigo contener la mirada al viejo
pues no distingo el loco del hombre cuerdo.

Intenté armonizar cien mil caras
viví oculto ajustando cien mil taras,
y como ratero que canta y recita
en el corazón llevé escrita...

Tan solo la palabra extranjero
abusando al llenar un vacío usurero,
hasta que un día en mi puerta
alguien pintó la palabra forastero.

Solo fui otro amante de la dama del viento
en mi cítara aún resuena su voz,
vibran sus cuerdas escribiendo un cuento
para ocultar y mostrar un rechazo atroz.

Inclinando la cabeza,tan solo un rato
un anciano pinta mi pequeño retrato,
desgranándose a si mismo en él
recordándome la miel...

olvidando del todo
recordando el cielo en el papel,
olvidando la sombras de hielo
recordando la miel
recordándome la miel,
recordando la miel...

(Froda Triboulet)