JUVENTUD Y te fuiste detrás de la tormenta Huyéndole a la noche que volaba Sobre la sien dormida por la frente vana. No todo lo que en sí se mueve; Huiste temblando en tu consciencia Por la empinada cuesta De la sierra negra. Te fuiste arrastrando tu miseria, Llevando de la mano mí cariño, El amor, juventud y mi agónica esperanza. De espaldas sobre el soto de tus ancas, Sobre el légamo febril de mis anhelos. Con un pétalo marchito, deshojado De la rosa de mis labios. Con la angustia toda; me dejaste En el fango senectal de mi agonía Libando la copa de recuerdos, Embriagado con amargo Licor de la añoranza. En la sublime noche del olvido Acariciando el retrato de mis sueños. Reinaldo Barrientos G. Rebaguz
Texto agregado el 22-11-2011, y leído por 131 visitantes. (3 votos)