| la montaña y la nube
 rocosa montaña, altura mayestática
 sobre mí, se recuesta amorosa
 nube, lamiendo mi torso
 yo, besando su vientre
 en amores temblorosos
 de anaïs y el perfume dulzón de la suavidad
 
 cielo, se quiere posar sobre nosotras
 oscuro y húmedo
 amenazante con sus lenguas metálicas
 grande,  protector, cruel,
 impotente, ante nuestro amor
 rabioso de celos y culpa,
 le duele el querer ajeno
 la suave caricia de tus besos,
 el húmedo masaje de nuestros cuerpos,
 la delicadeza de los abrazos,
 la cadencia de su pasar
 
 nosotras, en ardiente pasión
 no aceptamos el sometimiento
 vivir bajo su yugo de pesares y reproches
 siempre vigiladas
 arropadas por esa manta oscura,
 tan pesada
 tan amenazante
 amor mío, escondámonos bajo un edredón de plumas
 vaporoso y siniestro
 
 cielo, ruge enfadado y enloquecido
 abre sus carnes
 buscándonos en la oscuridad
 con su linterna mágica
 
 solo encuentra una cama desecha
 después de una batalla de amor
 la ropa a los pies
 con los colores de temporada
 marrones, verdes, ocres, amarillos
 la desnudez de la roca
 húmeda y dura
 la desnudez de la nube
 deshilachada y etérea
 
 montaña llora y las lágrimas
 recorren su cuerpo, bendiciendo su dolor
 nube, como las buenas amantes
 desaparece pronto,
 para ser añorada
 para ser recordada
 
 cielo, consuela a montaña,
 siempre la ha amado,
 lame su herida de amor
 con su calido aliento
 
 cielo, deja caer algunos hombres lluvia
 gordos, lastimosos y eficientes
 para hacer la cama, para estirar las sabanas
 
 unos pájaros, pian,  acurrucados muy juntos
 ateridos en la rama de mi melena espinosa
 huele a piel mojada y sale el sol,
 añoro a nube y la deseo con todas mis fuerzas
 rezó a Gea, para que aparezca, me abrace, me bese
 bajo el oscuro cielo,
 que todos temen, menos yo,
 la oscuridad que me trae, a mi amor
 a mi frágil amor
 ya huelo ese dulzor,
 me excito, se me abren las carnes,
 tiemblo, mueren hombres pequeños,
 aplastados por mi piel muerta
 lo siento, no puedo evitarlo
 
 
 
 Antonio © M.  ( T i T o. M.)
 21/Noviembre/2011
 Pensamientos Vagabundos
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
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