Yo veía el espejo en el que estaba reflejado, aunque miraba una escalera de copias que se dirigía al horizonte. Al observar hacía atrás descubrí un espejo en el que se reflejaba el anterior, lo que hacía mil yos. No me distrajo más que eso. Volví a mis tareas hasta que escuche un disparo, y volví mi rostro a donde salía el sonido, el espejo. Al observar el final visible de los espejos observé que en algunos solo estaba la habitación no yo, no estaba mi reflejo. Del último donde faltaba salió un hombre con un pasamontañas que disparaba a unos cuántos más, después volvía a salirse del plano. Asustado dí unos golpes al espejo gritando intentando romperlo, pero no lo lograba, mientras el seguía con su ritual de volver a uno de los planos y matar a unos cuántos y así sucesivamente mientras yo seguía gritando. Hasta que no quedaba nada tan solo mis copias del espejo de atrás. Al mirar atrás vi a aquel hombre del pasamontañas reflejado en el espejo al mirar atrás aquel tipo estaba ahí sacando una pistola. Intenté escapar, pero me alcanzo un balazo en el moflete derecho haciendo un gran agujero. Seguí corriendo pero no mucho tiempo volvió a disparar esta vez en el muslo izquierdo y caí rendido, mientras pensaba si lo del espejo había sido una advertencia, una ilusión para ayudarme. Hace un minuto de eso ahora, solo estoy concentrándome a ver cuán dejaré de notar la sangre caliente corriendo por mi cuello, ahora. Ahora no la notó ya vuelvo a sentir frío igual que cuándo tocaba aquel espejo notaba frío, aquel espejo estaba frío. Aunque este era un frío especial.