El cuarto majadero
En el camino empinado y escabrajoso van los majaderos.
Como puntero va Jesús, el de Belén con túnica blanca y de montura un burro, que canina cabizbajo con mirada de tristeza.
Atrás de el en una montura blanca, con la misma estampa del burro puntero, va el libertador, con camisa prestada la tristeza de su alma se refleja en su cara, detrás de el, en un caballo huesudo, como el caballero que lo monta y el alma de la pluma de Cervantes, va el quijote errante, su brazo cansado va arrastrando su lanza.
Casi pisando la lanza del quijote, montado en una mula un hombre vestido de verde, lleva terciado un fusil dañado, pelo largo y descuidado y boina negra con una estrella.
Van cabalgando el empinado camino de la historia, y tristes por la traición por el poder y la avaricia.
Los majaderos como cadena a paso lento como la historia, discuten por la gloria que hoy les dan los hombres, en los cuales muchos en ellos se esconden.
Bolívar le dice a Jesús, así como a ti un judas me vendió. Mis sueños destrozo y los negros siguieron, como esclavos, su nuevos amos son de su misma nación, son indignos guías que se escudan en el poder.
Quijote dice: aun que Cervantes me puso de loco para su gloria tenemos en común, Jesús, tú, bolívar el guerrillero de la mula y yo la locura por un ideal.
Jesús dice: soy el puntero de los majaderos y ustedes siguen mis pasos por que siempre habrá un lazo, de amor, entre el que expone la vida como sacrificio por la humanidad.
El cuarto majadero no creía en religión, pero la cuestión es la misma, dar su vida por los demas eso es amor.
Autor: Juan Alexis Díaz Chávez
6 – 11 - 2011
|