Había una vez dos chicos, una chica de ojos claros y hermosa sonrisa y un chavo que estaba enamorado de ella,
cada noche miraban el cielo nocturno, recostados en el parque que estaba en un punto medio entre sus casas.

Siempre que admiraban el cielo estrellado el chico tenia intenciones de decirle a su amiga que nunca se separara de el...
pero cada vez que lo intentaba la chica siempre le pedia que guardara silencio y disfrutara de esa hermosa noche y aquella maravillosa vista, por lo cual el chico no pudo decirle lo que sentía.

Poco despues el chico se entero que su familia se iría de la ciudad, inmediatamente fue corriendo a la casa de su amiga para decirle de una vez por todas lo que sentia, sin embargo en el camino hasta su casa reconcidero la idea y prefirio no decirle nada
¿De que serviria ahora?
ya me voy y no se si volveré
¿De que serviria decirle lo que siento ahora?

al llegar a la casa de su amiga le comento que se iria de la ciudad, su amiga de inmediato lo abrazo y solto algunas lagrimas, intercambiaron telefonos y prometieron hablarse todas las noches, mientras ambos veian el maravilloso cielo nocturno, al despedirse hicieron otra promesa, que algun dia volverian a ese parque a contemplar aquel hermoso cielo nocturno.
Al principio se hablaban cada noche como lo prometieron pero con el tiempo dejaron largos dias sin hablarse, hasta que dejaron de ser mejores amigos y se convirtieron en un recuerdo de amigo.
Tiempo despues el joven encontro el numero de su amiga y despues de 2 años de no hablarle queria saber como se encontraba y le intento hablar pero el numero habia sido cambiado. Al ver que no pudo comunicarse con ella y recordando el afecto que le tenia decidió ir a buscarla a su casa, viajo mucho pero al fin llego y llego en el momento justo, la luna que se admiraba en el cielo era particularmente hermosa esa noche tenia un tono azulado que la cubría.
Toco la puerta de su casa, y le abrio amablemente la madre de su amiga, cuando su madre la llamo, el joven se apresuro a decir
"ven salgamos, hoy la luna esta presiosa", pero descubrio algo que le dejo sorprendido.
Su amiga estaba ciega. Con sus ojos cerrados y una sonrisa sincera en su cara pregunto
"david ¿eres tu? te eh extrañado tanto"

ella estaba enferma desde pequeña y sabia que algun dia perderia la vision, por eso le encantaba observar aquel magnifico cielo nocturno al lado de su mejor amigo

el joven abrazo fuertemente a su amiga mientras le decia al oído
"yo también te extrañe" mientras platicaban de lo que habían echo su amiga le comento que antes que se fuera estaba empezando a perder algo de su vista, y que cuando se fue ella era incapaz de ver claramente la luna.
Que le hablaba diario para pedirle que le describiera el cielo nocturno, pero poco a poco esas conversaciones empezaron a ser menos frecuentes por culpa de ambos que las ocupaciones del joven, que las visitas al doctor de la chica etc.
y la chica le dijo que no podría cumplir la promesa de que pudieran ir a aquel parque a ver la noche juntos una vez mas. Ante ese comentario el joven tomo la mano de la dama y le dijo que la unica razón por la cual se recostaba a ver el cielo estrellado es por que quería estar junto a ella, y por fin el joven confeso su amor. Su amiga no sabia como reaccionar y preocupada le dijo:"pero no te podremos ir juntos al cine, ni ver los fuegos artificiales, ni ver la luna juntos..."

"A mi no me importa nada de eso, a mi simplemente verte sonreir es mejor que todas las películas que pueda llegar a ver, tenerte entre mis brazos es mejor que ver todos los fuegos artificiales del mundo y esto..."

en eso se acerco a la chica y la beso.

"...es lo mas hermoso de la inmencidad del universo"