cerré la puerta
pero no tiré las llaves.
la escondí en un rinconcito del alma.
y vagué,
vagué en medio de la la nada
del llanto
de las soledades que aun mías contigo,
son mucho mas frias sin ti.

me detuve a recordar el calor de tu alma
un calor inexistente,
un calor que nunca me diste no mas que en mis fantasias de niña loca
y tuve miedo de seguir, de enfrentarme a la vida sin ti
di tres pasos hacia atras
para volver a recojer tus migajas de amor.

pero era tarde para mi alma, mis mentiras y mis palabras...

ya no me saciaban tus migajas.