DE ALLA YTE*

El auto se deslizaba por la carretera.
Mantenía los ojos cerrados y traté de volver a la edad exacta.
El aroma de los naranjos en flor, impregnaban el ambiente. Mi corazón saltaba de contenta y hasta volví a escuchar las risas sin motivo de mis primos.

¡Hacía tanto tiempo!
¡Recordaba cada uno de los detalles!

¡Ahora estamos doblando la curva, de la ruta y casi la misma alegría de entonces, llena de nostalgia, me embriaga el alma!

Abrí los ojos, no quería perderme detalle.

¡Nada estaba igual!
Mientras nosotros crecíamos todo se transformaba.

Me llené de emoción al ver la vieja tranquera, L a que tantas veces cruzáramos corriendo, descalzos sin importarnos las espinas dentro del pasto.
Ya no existía la casita de los abuelos, pero mi viejo lapacho, sobrevivía.

Me bajé del auto y apartando las malezas, llegué hasta allí. Acaricié su vieja corteza y descansé sobre sus viejas raíces y me transporté en el tiempo.
¡Sus ramas se mecían, como queriendo saludarme!

¡Era todo un símbolo de una época!
Los fantasmas de la niñez. Rondaban y volví a escuchar sus cuentos, con el mismo encantamiento de aquel entonces.

¡Buscaba rastros! ¡Nada había quedado!

¡Sólo el viejo lapacho, como un centinela, resguardando nuestros recuerdos!


DE ALLA YTE palabra Guarani que significa de allá lejos