Del Diario de Nicholas Oswald Late, Primera anotación :

Así que aquí estoy, en los confines de un misterio que no es el mío, si no de alguien más, desterrado de aquel extraño lugar anterior. Me encuentro lejos de mi mismo en un logar extraño lleno de alucinaciones, muertes y efectos personales, solas, muertas y acompañadas de su propia desidia de un mundo que las creó. Las paredes son lúgubres y mi mano tiembla.

¿Han sentido eso?, ¿la Pausa terrible? ¿El momento en que me vuelvo carne y caigo en un yo perenne? Abismo, Abismo Siempre Abismo, Grita el Poeta. La muerte como ser esta más vivo que cualquier cosa respirante. Que otra cosa si no la máxima expresión de vida para destruirla? A mi alrededor se levanta basura, será eso la representación del interior del ser? o de mi mismo? desvarío y mi mente flota, insostenida e insostenible en la eternamente falsa variación del éter. Si he de llenar esta página,

Y ahí está de nuevo, la Pausa, la Muerte, la lúgubre mirada de las paredes sobre mi nuca. Levanto la mirada y el cosmos se abre ante mí, con aterrador, inconsciente Subconsciente y Te recuerdo, La recuerdo: apoyada sobre el amor de sus palabras, tan efímero como ella misma. Viento en un huracán, impresión de continuidad en medio de la destrucción. Caen mis ojos y cae mi Mano, muerta en la prisión de las mentes. Mientras la puerta de mi celda se abre, contemplo la continuación del espacio: un largo y obscuro corredor...

Abismo, Abismo, Siempre Abismo, Grita el Poeta...