...Y seguía llorando y sufriendo, por dentro y por fuera, teniendo que hacer lo mismo de siempre, exigiendome lo que siempre me han exigido, ser fuerte.
Pero seguía esperanzada, con un poco de luz en mi alma, cada vez alumbrando más mi destrozado corazón, y todo eso se llenó de tí, tu simplemente me diste eso que necesitaba, todo estaba en tí, y eso simplemente era amor.
Y yo me mantenía esperanzada, con la mirada buscando alguna salida, porque seguía atrapada en este mundo, sin escapatoria, sin alguna respuesta a aquellas dudas que quería resolver, pero simplemente todo estaba en tí, pero lo ví tan tarde, comprendí cosas que debí haber visto hace años, pero me ayudaste a seguir adelante y de pronto toda mi vida se convirtió en un sólo momento, todo el sufrimiento desapareció y tú estabas junto a mi. Y fuimos uno sólo.
Y desperté, alejada de este mundo, y al fin pude ser feliz junto a tí. |