Muñeca de cristal que no se deja ver, opaca. Muñeca de cristal maltratada, que perdió la guerra antes de empezar la batalla. Muñeca de cristal inexpresiva pero guapa. Dime pequeña, ¿quién te ha robado el alma? Si el ladrón se la ha llevado en trocitos, destrozada, que sople el viento y te devuelva tu sonrisa inocente y tu mirada.
Texto agregado el 19-09-2011, y leído por 245 visitantes. (5 votos)