Autor: Orlando José Hernández


Corazón de Cristal

Transparente y frágil
Musa y motivo
Deseos de amor, pasión
Ternura en tus labios
Los Cómplices de mi pecado
Dulce pecado si lo cobijase la realidad
Labios divinos
Rojos y delicados
Envueltos en tu sensualidad
Acompañados de un aura celestial
Bandidos que incitan de una forma sutil y callada
Son mis cayenas
Tu tierna flor
Única entre miles
Dulce almíbar del néctar de tu escénica
Delicada por fortuna
Herencia de tu ser
Cascada de esos tus sueños
Dignos de los sentimiento
Ocultos que tu alma abriga
Mil motivos
Halagos que un pensamiento emana
Sin ser oído
Hay de los segundos
Donde mis ojos te admiran
Detallan ligeramente
El atrevido viento jugar con tu cabello
Destello de luz en tu mirada
Es la ventana de tu alma
La puerta de tu corazón donde quisiera tocar
Morar en ti
Ser guardián de tus sueños
OH dulce mujer que mi corazón admira
En mis sueños queda el recuerdo intacto del primer Día que me correspondiste tan solo en una mirada desde entonces deambula inerte sin tiempo ni espacio…