Galileo aficionado a la mecánica miraba su viejo porsche y le hablaba como siempre como a su mejor amigo.
-Esta vez me la pusiste difícil querido Earl Grey- apelativo con el que lo llamaba por el color gris y el toque de distinción del auto. Se remangó el mameluco metiéndose entre los fierros hasta que el “conde”, como también lo nominaba, arrancó como un cero kilómetros.
-Esto hay que celebrarlo- le dijo acariciándole la carrocería- y embaló a ponerle la mejor gasolina y aceite, mientras el saboreaba un rissoto con hongos portobello con una coca cola ligth para conservar la figura, no vaya a ser que vaya a desentonar con la joya de sus amores.
Texto agregado el 07-09-2011, y leído por 158
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Lectores Opinan
07-09-2011
Imágenes literarias que son humor. Te felicito. peco