Caminamos en lÃneas paralelas pero nuestros caminos jama se cruzaran, alguna vez se cruzaron, pero nada mas que eso, caminamos, nos vemos el uno al otro, pero no llegamos a tocarnos, no llegamos a sentirnos, a amarnos
Salgo de mi habitación tan oscura como la noche, tan sombrÃa como mi alma
Una lÃnea de luz se cuela debajo de la puerta, como una luz de esperanza en mi vida, la única puerta, como la única salida. Llego allà corriendo muebles y tropezándome con ellos, como si fueran obstáculos que me impiden llegar a aquella puerta, en donde se que del otro lado hay luz, esa que tanto necesito para mis ojos y mi alma.
Logro llegar a la puerta, pero algo me detiene, algo me paraliza, ¿Qué es esa sensación? Deduje que era miedo, pánico…terror a lo que hay allà afuera para mi, ¿Qué será lo que me espera allà afuera? Será que tal vez esa luz, no sea nada bueno, tal vez si salgo afuera me encuentre sumido en mundo de tristeza nuevamente, ya en la oscuridad sufrà bastante, llore hasta quedarme sin lagrimas, sufrà hasta quedarme sin alma, camine en las vÃas de la vida, salte lo mas alto que pude los obstáculos que se me interponÃan, pero no fue suficiente saltarlos, debà haberlos superados mentalmente. Todo eso quedo grabado en mi mente, allÃ, para siempre. Como un pasado que me condena a muerte, con un pasado que debà haberlo terminado, y que es hoy una cuenta pendiente.
Camino y veo a la gente pasar, pero ellos no me ven a mi, soy la sombra de mi mismo, soy la nada misma para los demás, no les importo, y las personas que realmente les importo están lejos de mi, o se alejaron, me dejaron solo…tal vez, sea todo eso lo que me detiene ante esta única salida que me depara el destino, será que tendré que quedarme aquà para siempre y esperara a suicidarme. Será que tendré que seguir adelante, demostrar que a pesar que ya no tengo alma, a pesar que he muerto miles de veces, de tanto que me mate, de tanto que me mataron, demostrar que puedo, o quiero seguir adelante, solo tengo dos alternativas, cruza la puerta y valerme de mismo y ya no seré el mismo. Seguir a delante a pesar de todo. Demostrar que con mi verdad voy al frente sin ocultar lo que verdaderamente soy. No vasta con ocultarme en esta habitación y ser el único en mi vida con el cual tenga que vivir. Quiero ver a alguien mas a mi lado, quiero compartir mis alegrÃas y mis tristezas con una persona, llorar si es que me quedan lagrimas, sonreÃr, si es que logro acordarme de lo que era eso. Caminar por la vida de la mano de otra alma que no sea la mÃa, que no sea mi sombra.
Pongo mis manos frÃas y pálidas ya sin sangre sobre el picaporte que me llevara al otro lado. Estaba decidido a cruzar del umbral que me separaba de mi oscuridad hacia otro lugar donde supuestamente se encontraba la luz, la esperanza, otro camino.
Una luz me enceguece, esa luz que se colaba debajo de la puerta, ahora se transformo en un infinito espacio de luz. No podÃa ver donde terminaba ese inmenso espacio. Era luz por donde quiera que mirara. Apenas di dos pasos, me di cuenta de que el suelo era como la arena, pero blanca y como el polvillo, era mas parecido a la harina o algo parecido, pero mi celebro me indicaba que era arena. Era calida, suave como el algodón. Camine bastante y no encontraba nada en ese lugar, solo luz y mas luz.
Fue en vano haber cruzado esa puerta? Acaso este lugar es la otra cara de la oscuridad?
Lo opuesto? Sigue siendo la nada misma, pero con la diferencia que aquà hay luz, pero no veo nada mas que eso, luz y mas luz, no veo objetos, personas, alguien, algo, algo que me indique que no estoy solo en este mundo, una voz que me guÃe, un alma que tome mi mano y me indique el camino correcto, tanto es pedir tan solo eso? Acaso es que estoy muerto? En que momento si ese fuera el caso.
Camine y camine durante horas sin sentido, solo camine hacia delante sin saber porque. Sin saber a donde iba y con que me iba a encontrar. Solo querÃa encontrar a alguien, que como dije recién, para que me guÃe. Alguien con quien conversar, contar de mi vida, saber de la suya, compartir cosas que con nadie más compartirÃa.
Pero nada de eso pasaba, solo estaba yo con mi alma caminando y vaya a saber donde y que es lo que me iba a encontrar.
Mas delante de mi camino, veo un reflejo como un espejo en el horizonte…corro hasta quedar exhausto, con la ilusión de que allà encontrarÃa una salida, una respuesta.
Pero solo me di cuenta de que estaba mas que atrapado en aquel lugar de lo que yo pensaba. Me di cuenta de que estaba solo en aquel lugar, cuando llegue a aquel reflejo, que resulto ser un muro, un muro de cristal y del otro lado estaba ella, del otro lado estaba mi vida. Aquel lugar tenÃa color, tenÃa vida, tenia sentido…y ella estaba de ese lado, como si encajara con el paisaje.
PodÃa verme y yo a ella. Toco el cristal y cerro sus ojos, y de ellos una lagrima broto desde lo mas profundo de su alma, como si realmente me estuviera tocándome, lo mismo sucedió conmigo, sin poder evitarlo, sin parar de llorar…
Me di cuenta de que estaba condenado a estar en ese mundo, mundo que abandone con mi propia voluntad, me di cuenta de que la perdà para siempre, cuando supe que ella no era para mi…cuando desperté, me di cuenta, tarde, de que me suicidado por ella…
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