Cielo nocturno, después de la tarde lluviosa llena de nubes y tormentas eléctricas. Cielo nocturno, lleno de estrellas, con un viento gélido que cala los huesos. Las estrellas y la Luna, protagonistas de ese firmamento limpio, y una que más se destaca. Lucero blanco, la más brillante entre todas, eres tú, niña LUZ.
Texto agregado el 21-08-2011, y leído por 111 visitantes. (2 votos)