Esperando a que llame... ¿qué somos?... hemos pasado por muchas fases, yo supongo que hemos sido rollo de discoteca, luego amigos con ciertas licencias cuando las circunstancias lo permiten, yo quizá he pensado que hemos sido pareja, ¿y ahora? 17 meses y cuatro días sin verla, exiliada 1700 kilómetros, sabiendo de ella por sus llamadas espaciadas de una a otra cuatro o cinco meses. Me llamaste cuando se te iba a acabar el contrato... ah sí, cuando te iban mal las cosas porque no sabías el idioma y la gente con la que te relacionabas te caía mal... cuando no te habían invitado a una fiesta, que me decías que no querías ir a fiestas con esa gente y a los tres días me llamaste de resaca diciendome lo bien que lo habías pasado con ellos. ¿Sabes? déjame que te diga. Eres un encanto. No puedo ni imaginar qué habría sido de mí sin tus llamadas sin tu cálida voz siempre a mi lado. Así que otra vez si tienes minutos gratis llama a la portera y cuéntale el capítulo de la serie de la ostia y déjame en paz.