¿Cómo te sientes últimamente? ¿Un poco decaído, tal vez? ¿Viste algo extraño estos días? ¿Sí? Yo también. Así empezó todo...
La primera vez que vi uno de esos horripilantes seres, dejé de respirar por un momento debido al pánico que me provocó su aspecto amenazador y repugnante. Nunca olvidaré esa mirada.
Aquella noche, al regresar de mi trabajo, noté una extraña presencia y me volteé para descubrir quién me seguía. Alcancé a percibir unos ojos, aunque en realidad no había nadie.
Pronto comprendí que convivían con nosotros, pero no todos podíamos verlos, porque desaparecían de inmediato si se sentían observados.
Muchas personas los habían visto. Me sorprendió la diversidad de formas que adoptaban: algunos veían hombres-lobo, otros vampiros, y hasta ratas gigantescas. Organizamos una cacería infructuosa. Sólo los veíamos fugazmente, por eso no conseguimos atraparlos.
De a poco descubrimos algunas de sus costumbres. Les gustaba observarnos mientras dormíamos, y eso nos asustó aún más, porque desconocíamos cuáles eran sus planes. Muchos no querían dormir por temor a ser devorados durante el sueño, o algo peor.
Nos costó bastante conocer qué buscaban esas horribles criaturas, pero un día yo lo conseguí. Descubrí que se apoderan de nuestros sueños. Me di cuenta porque me quedé sin metas, sin proyectos, sin esperanzas, sin deseos de vivir…
Ahora ya nada importa; nada tiene significado para mí, ni siquiera me interesa perseguirlos.
¿Qué sentido tiene?
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