Rozas mi noche con tus dedos de luz te advierto tras la melancolía envuelta en un velo de fuego azul amante samotrácica. Dos gajos de naranja alivian mi sed gotas de silencio amor amargo se evaporan entre aromas acres rasgando la paz de mi sueño en ti.
Texto agregado el 20-07-2004, y leído por 145 visitantes. (0 votos)