Tengo una cita; De aquellas donde es imprecindible estar correcta y convenientemente presentable para los demás. No sé en realidad que ponerme, hay tanto atavío, tanto ornamento de donde escoger, y sin embargo no logro hacerlo.
Es extraño querer algo y no poder hacerlo, pero ya se acerca la quietud para remediarlo.
Es extraño querer enmendar y corregir el comienzo , y que impotencia sentir el no sentir, y no haber podido evitar el final.
Corregir el comienzo pudo ser un buen principio quizá de esta historia, pero eso ya no importa. Derribar la pared de lo imposible tambien pudo ser una opción, de haber sido posible claro. Me quedo con el haber pintado , haber coloreado un simple papel y arrancado de quién la vió siquiera una expresión, o tambien haber soplado al aire alguna palabra que llamára la atención de quién se tomó el trabajo de atenderme, y esparcido de su corazón con mis palabras alguna oscura nube de desilusión. Ahora que recuerdo, tambien me quedaría con tantos ratos errados y bochornosos tal vez, pero que contribuyeron a reencuentros memorables, e instantes gratos y largos en el tiempo con los amigos queridos, y los tramos difíciles que hicieron que uno se comprometa con esos seres extraños ayer y tan adentro de uno hoy, lastima no encontrarme con mas extraños.
Cuando sopla el viento regresando las hojas recogidas del suelo otoñal, esparciendolas nuevamente, envolviendo y tocando a quién las recogió con tanto esfuerzo, ¿así será, quiénes recuerden mis dias en sus vidas?. ¿Donde estaré, ahora que no estaré?, ¿respuestas?, dificil siempre saberlo; pero espero estar allí, donde uno no muere , ni desaparece, ni menos se corrompe en el olvido. Espero el comienzo, ahora sí un buen comienzo, y no el final de lo que no se ha dicho, ni de lo que se teme decir para no dar paso a la desilusión. Creo que ahora sí podré contar un buen final para esta historia. No sé si nos encontraremos, quisiera decir que sí, Creo que Sí. Pero de no ser así, no arranquen de su memoria, ni sacudan de sus ropas aquellas hojas que
un dia, en mi hora otoñal los tocó.