La inspiracion escondida bajo la cama,
O en alguna colcha olvidada en días de margaritas y algodones de azúcar,
En el parque de diversión que siempre imagina mi cabeza,
O tal vez bajo el hombro de un hombre que a la distancia hace eterna y la soledad el peor castigo,
A flan de coco o de alguna manzana verde con su toque agridulce,
Humedece los labios y da un mordisco,
Ya no se, que mas?.... tomo un vaso con agua, y vuelvo al mismo sitio,
Donde no he dado un paso,
Me levanto,
Tomo un libro en el primer acápite me parece aburrido,
Lo tiro,
Me levanto voy, y vuelvo, una vez más,
Ya no se dé arañas recién paridas,
Ni de cuentos bohemios pero alegrones,
Recuerdo esas mañanas repletas de muñecas no tan bellas pero mis preferidas,
En una esquina donde nadie escuchara mis parlamentos de monologa enloquecida,
Donde solo eran mis muñecas y yo casi inexistente,
O más bien a la máxima expresión de cordura,
No sé si fue tu estancia o tu partida,
Ya que de todas maneras me quede al borde de la cama esperando que amanezca el nuevo día,
Para empezar a recorrer esas mismas calles en tus tiempos fueron mías y tuyas,
Y fingir estar sonriente con el torozón embocado,
Acaricio mi cabello, como sintiendo tus manos sobre él,
Recorriéndolo,
Descubriéndolo,
Llenándolo, del brillo que es por excelencia tu talento,
y verme en la sombra de tus ojos,
Salir del alma y juntarla con la tuya como vuelo alto más allá de las nubes,
Más allá del cielo si es que existe,
o es puro Co2 y otro estudio de física que siempre reprobaba.
La vida se me va mientras sostengo las palabras,
Y mis ojos se desbordan como que algo inevitable temiera,
Como que sintieran el dolor que penetra mis pupilas y mi pecho,
Soportara todas las promesas que quise creer porque me dio la gana,
Porque merecí cada beso,
Cada caricia,
Cada explosión de amor y es que no hubo nada más bello que sentir,
Estando refugiada de la tempestad que aguardaba por mí, tras la puerta,
El silencio fue suficiente para hacerme feliz y ahora es lo que más me hace falta..