Acariciar el silencio
Y el aliento
Que queda,
Cuando las miradas
Se coquetean.

Acariciar el suspiro
Que provoca
Tan solo tenerte cerca.

Acariciar más allá
De tus manos y tú rostro.

Quiero acariciar tú pensamiento,
En agradecimiento
Por hacer de esta instancia
Un hecho real,
Que escapa a lo que el destino pretendía,
Por ser el sueño
Que siempre tuve en mente,
Y que el sol y la luna
Con su bendición,
Predijo que nuestros labios
Se comunicarían sin hablar.

Acariciarte,
Es lo que pretendo,
Aunque tenga las manos atadas,
Te acariciaré
Con la fuerza de mis deseos
y con la pasión
con la que mis labios quieren sentir los tuyos.

Acariciarte y abrasarte fuerte,
tan fuerte,
que sientas que soy yo,
quien se refleja cada mañana
en tú ventana
cada vez que amanece,
cuando no me encuentres a tú lado.


Que soy yo,
quien hace posible
que te ciegues cuando te doy un beso,
y que entre la oscuridad de la noche
escuchas el susurro en tu oído
que mi boca te dice frágilmente
la palabra amor.