Esa muchacha me esta mirando… Me cae de papayita ahora que Sandra me dejo…Cambiarme por la güeva del Ramiro. Definitivamente se chiflo…En fin. Quién entiende a las mujeres. Pero lo que soy yo me saco el clavo con ésta. Es bonita…Está muy querida la muchacha. ¿Será que le hablo? Se ve como interesada… ¿O no? Hombre pero si me viene mirando desde que hice la fila para entrar, seguro que me cogió ganas ¿O que tal que sea de esas calienta-huevo que mucho tilín tilín y nada de paletas?
Que va, averigüémoslo, de una. No, pero espera, con calma. ¿Cómo lo vamos a hacer? Haber, inventemos algo. Hem….mm… ¡Ya sé! Arrancamos esta hoja y escribimos en ella…Haber, ¿Qué escribimos? Algo original como: ¡hola! mi nombre es José ¿y el tuyo? Como para empezar ¿Cierto? Oiga, me gustaría conocerla; vengo seguido a la biblioteca y hasta ahora…nadie había logrado impresionarme ¡en serio! Mire que desde que la vi, no he podido concentrarme en la lectura y….definitivamente tendré que hacer algo al respecto.
Esto es lo que haré: le voy a entregar ésta nota; yo me regreso a mí puesto, entonces usted la lee y cuando la haya leído me mira, sí, me mira. Ahora. Si me regala una sonrisa, me hará la persona más feliz del mundo y se convertiré en ese instante en la causa primera y la última de mi existencia. Pero si me mira y de inmediato pone cara de cañón, entonces mi vida ya no tendrá sentido. Saldré de aquí y me arrojaré al primer carro que pase.
Pues a ver que pasa…no se sorprendió al recibir la nota, ósea que esperaba a que me manifestara. Apuesto a que me va a sonreír. La madre que me tiene ganas ¡Me sonrió! ¡Marica, me sonrió! Se paro, se va a venir… ¡se vino! ¡Hola! ¿Le gusto la nota? Original ¿verdad? ¿Eh?, ¿a dónde va? ¿Y ese tipo?... ¿Se estarán riendo de mí? ¡Rompió la nota! Mocosa estúpida, rompió la nota… Pero que va, ella se lo pierde. Ni que fuera a arrojarme al primer carro que pase ¿Quién entiende a las mujeres?