Les voy a contar algo que me ha sucedido en la vida real, el día 21 de enero del año 2011, en la playa de Cabrera, Nagua. Ocurrió a eso de las 5pm, el viernes.
Este mismo día, fui de viaje con los vecinos del barrio a la playa de Cabrera, salimos desde las 9am y allá llegamos casi a las 11am, viajábamos en un minibús. Cuando íbamos de camino estábamos muy contentos, éramos 16 y yo somos 17 personas.
No sabíamos bien el camino y llegamos a una pequeña playa llamada El Diamante, pero era una playa muy tranquila, sin olas. Nos decidimos mejor ir a Cabrera, que sería mucho mejor.
Allá nos divertimos mucho, había también un rio en ese sitio. Comimos mucho hasta saciarnos. Ya siendo casi las 5pm, al ver esas olas tan fuertes, a mi me llegaron a arrastrar hasta lo profundo que hasta casi me ahogaba (no sé nadar). Yo gritaba auxilio, mientras que mi hermana y los vecinos creían que yo estaba relajando, luego al ver ellos que no podía mas, alguien extendió su mano y me salvo.
Yo la verdad es que mientras me estaba ahogando, yo atentaba piedras hacia abajo (según decía mi hermana, que abajo había un hoyo) y mientras más me halaba la ola hacia adentro ya no sentía pisar fondo y el agua me hundía hacia abajo. Trague agua por la boca y en la nariz.
Cuando me pudieron salvar, me sentía muy desesperado, no podía respirar bien (respiraba como si estuviera cansado), me tire en la arena, escupía, me atacaba una tos muy fuerte, y la nariz toda llena de agua, sentía miedo, nervios y el corazón muy acelerado y además un frio tremendo y un temblor en mi cuerpo.
Desde que me vieron que estaba asi mi amiga llamada Draysi trato de ayudarme y los demás de una vez se dieron cuenta de que si me estaba ahogando. Luego Draysi me dio un poco de agua, me prestó su toalla y me senté bien tranquilo hasta que se me calmaron los nervios, ya estaba muy bien.
Ya al momento de regresar a casa, salimos a las 6pm llegando a casa sano y salvo. Todo fue gracias a la vecina que me había salvado llamada Blussette. En el minibús le voy dando gracias a Dios primeramente porque la verdad yo creía que ya en ese momento podría haber muerto ahogado y nadie sabría de mi. Yo creía que ya hasta aquí llegaba mi vida.

Mensaje: Hay miles de personas que lamentablemente han muerto ahogadas, acerca de las olas del mar, porque son demasiadas fuertes.
Toda persona que no sepa nadar, tratar de mantener la precaución, tratar de cuidarse de sí mismo.