Inicio / Cuenteros Locales / experimental / Ejercicio18 - Los cuartos
LOS CUARTOS
Era de madrugada, la voz de César sonó convincente en mi teléfono.
-Venite ya a la casa.
No pregunté motivos, busqué una campera y salí. Hacía frío, me dije:
-Ojalá tengas un buen motivo para hacerme salir, César.
Toqué el portero.
-Empujá la puerta, está abierta.
Subí las escaleras, César estaba derrumbado en el sillón de mimbre, el loro Galileo reclamaba comida, del techo se descolgaban tres arañas, el espejo tartamudo estaba en el rincón junto a la biblioteca de fórmica. La bola espejada giratoria parecía serena.
-¿Qué te pasa? – lancé.
-Es la casa, mejor dicho, cada cuarto de ella.
-¿Qué tienen?
-En cada habitación que entro todo se repite, pero distinto – dijo César.
Busqué la planta de marucha, estaba algo diezmada, él advirtió mi gesto.
-Escuchá, no prejuzgues – se enojó – Aquí las cosas están como las ves, pero allá - señaló la puerta más lejana – El loro se descuelga del techo, la biblioteca es espejada, las tres arañas se hacen llamar Galileo, el espejo es giratorio y la bola tartamuda.
Lo miré incrédulo.
-Pero en ésa – señaló la puerta más cercana y un gesto de terror se le acomodó en el rostro – Son tres loros giratorios, la biblioteca tartamuda, las arañas son bolas, el espejo es de fórmica y cuelga del techo.
Reí nervioso.
-En aquella otra el techo es giratorio, las arañas son espejadas, el loro tartamudo, la biblioteca reclama por Galileo y el espejo es de fórmica.
-Quiero verlo – dije desafiante.
-¿Estás seguro? – preguntó César al tiempo que se levantaba y me acompañaba al primer cuarto.
Entreabrió la puerta y vi la bola de fórmica balanceándose del techo.
-Me parece que deberíamos avisar al resto – dijo.
- No – dije – el resto ya lo sabe.
-¿Cómo?
-Cada cuarto que fuiste viendo es la consecuencia del pensamiento de cada uno de los que conocen esta casa.
-¿Y vos?
-No, César, el mío es toda esta historia - dije. Pero al girar, él ya no estaba.
(Marfunebrero)
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Texto agregado el 21-06-2011, y leído por 260
visitantes. (6 votos)
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Lectores Opinan |
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23-06-2011 |
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glup... que hiciste con Cesar?' muy bueno!!, con ese toque de Don Marce. mcrist |
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23-06-2011 |
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¡Excelente! Una historia muy buena. Felicitaciones. nefftali |
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22-06-2011 |
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Una aclaración: el cuarto que el espejo es el en techo, la rueda giratoria, los grilletes, fue creado por una amiga con quien vine.. jaja. Buenisimo, Marcelo! cesarjacobo |
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22-06-2011 |
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Muy buen cuento. aberas |
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22-06-2011 |
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Aplausos!!!, que visiópn locamente lograda Marfunebrero!! como siempre, gratisimo placer!!************ nanajua |
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21-06-2011 |
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Tremendo y espeluznante, al leerlo me sentí como cuando entraba de pequeña en la casa de los espejos, confundida, perdida y casi temerosa, todo era realmente extraño. Te luciste! Aplausos para el Marfunebrero que cuelga del techo con tres arañas espejadas que le llaman Galileo nayru |
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21-06-2011 |
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Genial esa visión multifacética de la casa, y con un final fantástico en todos los sentidos. walas |
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21-06-2011 |
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Me encanta este final, muy sutil ;) Me quedé pensando cuál de todas será mi habitación, mmm, creo que la de los loros giratorios... /////// La_Aguja |
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21-06-2011 |
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Yo sabía que alguien se fijaría en lo hermosa y peculiar que quedó la habitación que imagine, gracias por el detalle marfunebrero, por cierto no te encantó?, la mia es la de las arañas espejadas******* shosha |
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