Los siguientes tres poemas pertenecen al poemario "Poemas en rosa obsceno" y no son aptos para cualquier lector, puesto que el tema es explícitamente sexual (al modo de los "Sonetos Lujuriosos", de Pietro Aretino)

I
Ven a mí, dulce cántaro de ambrosia,
Que quiero probar los jugos que llevas,
Tú, que te escondes en medio de las piernas
Donde apretando exprimes la semilla mía.

Recipiente cóncavo de rizada corona
Que a las mujeres das nombre y figura,
¡Mira que soy hombre y mi enhiesta columna
Al techo de tu templo sostiene, place y embona!

No temas que al chorro tempestuoso y blanco
Que expulse al final del fiero vaivén,
Como sorpresa cruenta nos vaya a traer
A los nueve meses criatura y llanto,

Pues en estos menesteres soy muy diestro
Y para evitarlo, dulce coño, hay maneras;
Lo más efectivo es echarlo afuera
Que la pena viene si es que se viene adentro.

Y aunque hay más portales donde el miembro cabe
Te prefiero a ti, blanda y húmeda fisura,
Que si eres de una puerca o de un alma pura
Eres manjar que siempre a goce sabe.

II
Ni estoy loco ni el intento será en vano
Cuando te digo me des entrada,
No por donde acostumbra la gente refinada,
Sino por ese orificio que llamamos ano.

Que para eso no fue hecho, que no cabrá,
Dices, dudando de la natural sabiduría
Que tuvo a medidas dar por dónde y dónde se podía,
Y a su amparo y sin esfuerzo se podrá;

Muy cierto es que el sucio excremento
Por ahí encuentra del cuerpo la salida,
Pero el pene se limpia y tu ano con saliva
Se lubrica y me recibe si lo hago calmo y lento.

No te miento, te dolerá al principio,
Como cuando tu vagina fue bautizada,
Pero el dolor se va si estás relajada
Y no frunces en demasía tu orificio.

Te llegará un placer antes desconocido,
Talvez el dolor te sea como un condimento
Y te sea más fácil llegar a ese momento
En que sucumbes y miras al infinito.

III
-¿Qué es lo que esperas? ¡Estoy impaciente
En esta postura canina esperando tu ariete!
¿Por qué no embistes? ¿Te has puesto flácido?
Si es así ¡a mi boca y creces rápido!

- Nada de eso, amor, sólo estoy sorprendido
Que tan inmenso culo vaya hacerlo mío.
Porque en esa posición tanto se te expande
Que sólo el horizonte puede ser más grande.
Además me parece sumamente hermoso
La forma perfecta de tu ano y tu coño.

-Entonces admira y escoge el que prefieras
Que gozo igual por donde meterla quieras.

-Me causa tanta felicidad que me digas eso
Que siento ponerme aún más tieso y grueso.
Por tu coño dulce primero empezaré
Y en la estrechez de tu ano con brío me correré.

-¡Ay, te siento penetrarme con tal bravura
Que me vengo mil veces en verga tan dura!
- ¡Y yo del éxtasis voy sintiendo el llamado!
¡Creo que es hora de inundar completo tu ano!