La Carta

(Dedicado para siempre arena)

Loco de amor y de pasión un día
sin poder alejarte de mi mente
Te declaré mi amor serenamente
en un blanco papel que te escribía

Luego esperé, de tí, en la agonía
de la tarde, respuesta sonriente
Sin recibirla recliné mi frente
en la noche sin sol, sin alegría

Murió la tarde, el astro de la noche
borró en secreto mi profunda pena
mientras el cielo en plácido derroche

ostentaba por la mansión serena
un ramillete azul de rosas bellas
donde a llorar salían las estrellas