Dedícame un suspiro,
uno de esos lentos,tiernos,
ni siquiera me digas cuando lo harás
sino quédate conmigo
para sentirte,
dedícame un gesto,
si, si, ese mismo
cuando me viste por primera vez
y llegaste con tú mirada en mi corazón,
dedícame una caricia,
suave, delicada, sutil,
una caricia como aquellas
que me brindas mientras me besas,
esas caricias que dan ganas de llevarlas
y guardarlas en un frasco
para poder sacar un poco por la noches
y dormir con ellas,
dedícame un beso,
si, un beso,
que yo lo sabré guardar
y ampararlo para siempre,
un beso para despertar
un beso para cuando mi alma no te encuentre
un beso para cuando mis ojos estén en la más profunda soledad,
un beso en la tarde, cuando llegue cansado después del trabajo,
un beso antes de dormir
para soñar con esos besos,
en fín,
dedícame un segundo, solo uno
y sabrás lo mucho que te quiero,
y verás en mí
la señal predilecta
para saber que debes hacer conmigo,
si debes mirarme,
o bien quedar en silencio,
para saber si
es preferible abrasar
en esos días de lluvia,
o de decirme a través de un susurro
no te alejes de mí
que hoy
quiero que estemos juntos
desde ahora y para siempre. |