Imagínense estar arriba de una montaña y luego vean hacia abajo, la caída no es abrupta es una caída suave como diría Cantinflas, abriéndose, abriéndose desde la cima hasta el valle abajo, esta fácil de imaginárselo no?
Ahora bien, piensen en lo que habita esa ladera de esa montaña desde hiervas e insectos hasta animales grandes como lobos y conejos y díganse, este es el año I y por lo tanto hay mucho mucho espacio entre lobo 1 y conejo 1 entre hormigueros entre hierbas buenas y hierbas malas y hasta entre hombres si hombre también desde allá arriba se ven una que otra cabaña con un hombre una mujer y un niño, el niño esta bañando su caballo y a señora esta ordeñando la vaca.
Agarran la onda? Pero acuérdense es una montañota ota ota y apenas se alcanza a ver 2 cabañas bien bien lejotas la una de la otra pero también sabemos porque desde arriba todo lo sabemos que hay donde ya no vemos mas de todo lo que vemos desde aquí y si vemos para atrás y hacia abajo vemos mas de lo mismo.
Bueno ya vimos y ahora que, pues ahora quiero que cuenten las hojas que hay por metro cuadrado y fíjense como la señora y el niño tienen las mejillas rojizas y el senior arando la tierra también tiene las mejillas rojizas y se limpia el sudor luego de quitarse el sombrero, ves como donde esta arando ya no abra mas hojas? Así es que piensen si al principio cuando llego e hizo su cabaña habían 10,000 hojas por metro cuadrado, ya se que no las han contado todavía esto es solo un supuesto puej, ahora que termine de arar tendrán solo 9,500 / m2 eso en cada metro de toda, toda la ladera.
Y entonces? Pues que de esas hojas sale el oxigeno que al absorber el CO2 con el sol la clorofila libera, ahora bien entre las cabañas que se van haciendo mas cada año van bajando bajando el numero de hojas por cada metro cuadrado, luego hagan un camino para una carreta para llevar los niños de muchas cabañas a la escuela, ahhh primero hagan la escuela, ya le dieron en la torre a mas hojas, pero alguno de los señores se dio cuenta de un documental que vio en PBS y dijo no muchachos, hay que sembrar mas árboles por cada árbol que hemos tirado para que el numero de hojas no varíe, pues si varia ya no va a alcanzar el oxigeno que hacen las plantas y como nos estamos haciendo mas el sembrar solo unos arbolitos no la va a hacer, tiene que ser algo mas movido mas huracanado, tenemos que hacer un invernadero y luego tener a gente que se dedique a sembrar árboles a cada rato sino nos llevara la asfixia.
Así pues se hizo y desde enantes el hombre fue creciendo pero el numero de hojas que se veían desde arriba en la ladera no bajaba de las 10,000 por metro cuadrado con las que comenzaron. Y hubo aire para todos y para siempre.
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