Prefiero amar con versos, no con besos,
así tu no me entiendas y te rías
de mi amor inventado
con cadencias metáforas y rimas.

Tú prefieres amarme con tu cuerpo,
yo con letras escritas
sobre un papel que puede ser eterno…
Tu cuerpo se marchita.

Un poeta escribió:
“Eres tú la mujer más infinita”.
la mujer ya murió,
las letras siguen vivas.

Junto a tu piel deseas mi presencia;
jamás yo sufro por tu lejanía;
siempre te llevo en mi cuaderno donde
los versos dicen más que las caricias.

Tal vez yo no se amar como los otros
con entrega, con sábanas, con risas,
y concibo el amor como una escusa
para hacer poesía.