DESCONSUELO 144 palabras

El desconsuelo vive en mí,
Tarde de luces coloreada,
Son deseos de ser párvulo impúber,
Flagelación, de ésta mi alma,
Alucinación de tardes vespertinas.

Remonto las frías montañas
Y hago míos lo penachos
Que dibujan constantemente
En mullido pergamino del cielo
Y así, arropado con la clámide
Transparente y blanquecina
De la niebla,
Me confundo con el gélido
Narciso de la aurora.
Allí fui sorprendido
Por latentes rayos
De un mirar sombrío.

El sol, descubrió mi boca abierta,
Evocando una plegaria
En tierna armonía.
Tuve el deseo infinito
De regresar
Y tomar el cáliz,
Sufragio de la inconformidad
Sutil de la flaqueza.

Llené mi alma de júbilo,
Abandoné los sarcófagos
Horripilantes de la envidia,
Mi libidinoso pensamiento
Desplegó sus alas
Tocando los rincones
Místicos y profundos
Donde germinan los surcos
Que enmudecen
Ha las vírgenes de Apolo.

Renaldo Barrientos G.

EBAGUZ