Porque ahora soy yo mi propia quimera,
perdida opera prima gestada con disimulo,
creo en mi silencio. Punto y aparte.
Voy hacia donde mi utopía transita,
mimetismo atípico que mar adentro,
miran otros ojos. Inmutable imagen,
vital e interesante, girando en el tiempo,
Encerrada en la nada del todo que día a día,
se va, lento, forjando en esta fatua ilusión
que por apelativo lleva mi nombre.