Como que sí, como que no y tal vez,
como que estamos solos a la vez.
tú prisionera de tu corazón
y yo de mi dolor.

Tu soledad inmensa es como el mar,
la mía como el río que hacia el va.
Entre los dos eres la suave flor
y yo la espina soy.

Tu ser es sol, es pura claridad,
el mío oscuridad.
En tu mirada hay vida y esplendor,
mis ojos ciegos son.

Tu boca almendra, rosa y fresca miel,
la mía es aridez.
Tus manos alas, aves, libertad,
tensas mis manos casi siempre están.

Tú y yo los dos, pero muy solo yo,
eres un sueño de mi corazón,
en mi cerebro un resplandor de luz,
una ilusión no más, eso eres tú.