Han pasado las horas, los minutos, los días, las oches, ha pasado el tiempo sin misericordia; aun así, el sentimiento que ha nacido aquí, dentro de mí, sigue intacto y a salvo. Mejor aún, los recuerdos, siguen seguros, resguardados y sin la mas mínima señal de desaparecer. Los mantengo, porque ellos han pasado a ser como la lluvia milagrosa que cae en el desierto de mi árida mente, como el rocío fresco de una madrugada en silencio o una tarde en caluroso verano..
Yo estoy aquí, añorando cada día el poder agregar otro recuerdo a mi colección, otro suspiro, otro latido incesante y apresurado de mi corazón, que aparece cuando estoy contigo. Un beso, una caricia, un abrazo, el aliento tibio de tu boca sobre la mía, el olor agradable de tu perfume, tus manos junto a las mías, tus ojos cuando me miras, tu sonrisa..
No es cierto que puedo estar bien si no te veo, no es cierto que puedo seguir con mi vida si no se de ti, de lo que haces, lo que piensas, lo que sientes, lo que imaginas, necesito saberlo todo, sentirlo todo, escucharte, tocarte, respirarte.. Mi corazón ha creado un rio interminable de ternura y amor, de placer, de felicidad; y no hay otra fuente que la necesidad de ti, de tu amor, de tu presencia..
Mis recuerdos permanecerán, cada instante que estés a mi lado se volverá un sello imborrable dentro de mí; y tu amor, aquel que siento y anhelo cada día más, aquel que me inspira a seguir, a vivir.. Yo tengo la felicidad contigo, el amor verdadero que siempre soné, y sé que sin ti no tendría nada, no podría abrir mis ojos cada mañana y sentirme en paz y tranquilidad. Sin ti amor, mi desierto se agrandaría, mis noches serian eternas, mi sueño una pesadilla; por ti lo tengo todo, mas sin ti, perdería la razón de mi vida..