No eras luz de una noche No eras rocío evaporable No eras remedio escondido Tampoco veneno implacable No eras el fuego eterno No eras mi llanto No eras mi tiempo Eras canción y recuerdo Eras el frío y mi silencio Eras tragedia Eras un sueño Fuiste perdiéndote lento Como un débil suspiro Como respiro del viento Eras y no eras… Porque fuiste sol Porque fuiste piedra Eras... No eras... Y aunque no quieras ayúdame a vivir… ¡Limpia mis años y quédate afuera!
Texto agregado el 31-05-2011, y leído por 359 visitantes. (7 votos)