(Rimas de esperanza) Yo tengo una casa de materia frágil Es pobre, muy pobre y de escaso valor Aunque al fin dejarla no puede ser fácil Tampoco creo verla ahora mejor. La casa terrena se va desgastando Mas la celestial bella y nueva está Con decisión firme una voy dejando Y sigo gozoso do mi Señor va. Dos sitios, dos casas: la una es gloriosa Aquella que Cristo me fue a preparar Mi casa divina es casa preciosa Es ésta mi casa verdadero hogar. Un lugar seguro digno de desear De sublime gloria es inmensurable Donde creo que pronto iré a descansar. Autor: Saúl Esquivel Predroza Guanajuato, México. 1924-1994.
Texto agregado el 27-05-2011, y leído por 155 visitantes. (1 voto)