Es en momentos como este,
Cuando el silencio te grita lo solo que te sientes,
Cuando el frío en el aire calienta tu cuerpo
Y el calor de tu cuerpo hiela tu alma,
Que necesito con tantísima desesperación
Un par de brazos rodeando mi pecho,
Un hombro sobre el cual llorar,
O al menos alguien que me escuche...

Es en momentos como este,
Cuando la soledad es tu mejor y única compañía,
Cuando un grito desesperado inunda mi esencia,
Que una lágrima etérea cae por mi alma
Y una gota de tristeza se une a la lluvia
Que por tanto tiempo ha inundado mi caminar…

Es en momentos como este
Que te necesito, ser esquivo,
Ser real dueño de tantos mitos
Y de tantas sonrisas atrancadas en la crisma,
De tantos buenos atardeceres,
De verbo fecundado en una noche de tertulia,
De pensamiento, palabra y verso,
De brazos entrelazados contemplando el horizonte…

Pero este es el momento
En que el silencio me grita lo solo que me siento,
En que el frío me cala hasta los huesos
Y no están tus brazos,
Ni esta tu hombro…

Y lloro…

Porque es en momentos como este
Cuando más falta me haces,
Cuando la vida más duele
Y cuando menos puedo encontrarte,
No en mis letras, ni siquiera en estas,
No en mis memorias, los recuerdos no abrazan,
No en mis mitos, son solo palabras,
No en este maldito nudo que tengo en la garganta,
No estas… Y me haces falta…

Porque es justamente en momentos como este
Que descubro mi propia verdad olvidada,
Mi propia ‘tristeza sublime’…

Porque es en momentos como este
Cuando te busco en todos los rostros,
En todos aquellos que llaman mi nombre
Y comparten conmigo unos pequeños momentos
De su vida…

¿Estas ahí?
¿Existe algún 'ahí'?
¿Al menos podrías pretender que existes?